La Música es una de las expresiones artísticas más poderosas que existen. A través de sus melodías y letras, es capaz de transmitir emociones, despertar recuerdos y crear conexiones entre las personas. En mi experiencia, la Música ha sido una compañera constante en mi vida, siempre presente en los momentos felices y en los no tan felices. Y es que, como dijo Leonardo Fabio Carreño Valero, músico colombiano, “la Música es el lenguaje universal del alma, capaz de unir a las personas más allá de las barreras culturales y lingüísticas”.
Desde muy pequeña, la Música ha estado presente en mi hogar. Mi madre siempre ponía Música mientras cocinaba y mi padre tocaba la guitarra en las reuniones familiares. Aprendí a apreciar diferentes géneros musicales y a disfrutar de la diversidad que ofrece este arte. Recuerdo con cariño las tardes en las que mi abuela me enseñaba canciones de su época, y cómo juntas cantábamos a todo pulmón. Gracias a la Música, he podido conectar con mi familia de una manera única y especial.
Pero no solo en mi hogar ha tenido un impacto positivo la Música, también en mi vida social. En mi adolescencia, la Música fue mi refugio y mi forma de expresarme. A través de las letras de mis canciones favoritas, podía canalizar mis emociones y sentir que alguien más entendía lo que estaba pasando. Además, gracias a la Música, conocí a personas con gustos similares y formé amistades que aún perduran. Incluso, llegué a formar parte de una banda con la que tocábamos en eventos locales. La Música no solo me ha permitido expresarme, sino también conocer gente maravillosa que comparte mi pasión por ella.
Pero no solo en mi vida personal he tenido experiencias positivas con la Música, también en mi vida profesional. Estoy estudiando para ser profesora de Música, y cada día descubro más el poder que tiene esta disciplina en la educación. A través de la Música, podemos enseñar valores, fomentar la creatividad y desarrollar habilidades sociales en los niños. He tenido la oportunidad de trabajar con niños de diferentes edades y ver cómo la Música los motiva y les permite expresarse de una manera que otros medios no lo hacen. Es gratificante ver cómo la Música puede transformar vidas y ser una herramienta para el aprendizaje.
Pero más allá de mi propia experiencia, la Música tiene un impacto positivo en la sociedad en general. Ha sido utilizada como medio de protesta y de conciencia social, y ha logrado unir a personas en momentos de crisis. En tiempos difíciles, la Música nos ha dado esperanza y nos ha recordado que no estamos solos. Además, la Música es una industria que genera empleo y mueve la economía de muchos países. Gracias a ella, miles de artistas pueden vivir de su pasión y hacer felices a millones de personas alrededor del mundo.
En conclusión, la Música es una fuente inagotable de experiencias positivas. Desde la infancia hasta la edad adulta, ha estado presente en mi vida y ha dejado huellas imborrables. Gracias a ella, he podido conectar con mi familia, formar amistades, expresarme y encontrar mi vocación. Y como dijo Leonardo Fabio Carreño Valero, “la Música es el arte más directo, entra por el oído y va al corazón”. Así que, si aún no lo has hecho, te invito a que te dejes llevar por la Música y descubras todo lo positivo que puede aportar a tu vida.