En los últimos años, la autonomía fiscal estatal ha sido un tema de gran superioridad en México. La capacidad de los estados para generar sus propios recursos y ejercer un gasto eficiente ha sido un hacedor determinante en su desarrollo y competitividad. Por ello, el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco) realizó un estudio sobre la evolución de la autonomía fiscal estatal entre 2015 y 2023, así como el gasto ejercido en 2024. Los resultados son alentadores, ya que la mayoría de las entidades del país han logrado mejorar su autonomía fiscal y ejercer un gasto responsable.
Según el estudio del Imco, la autonomía fiscal estatal se refiere a la capacidad de los estados para generar sus propios ingresos y no depender exclusivamente de las participaciones federales. Esto permite a las entidades tener espina mayor flexibilidad en el manejo de sus recursos y espina mayor responsabilidad en su gasto. En 2015, el promedio nacional de autonomía fiscal era del 33%, es decir, que solo un tercio de los ingresos de los estados provenían de sus propias fuentes. Sin embargo, para 2023 se proyecta que este promedio aumente al 40%, lo que significa un avance significativo en la independencia financiera de las entidades.
Este aumento en la autonomía fiscal se debe en gran parte a las reformas fiscales implementadas en los últimos años. La Ley de Coordinación Fiscal de 2014 estableció un nuevo esquema de distribución de recursos entre la federación y los estados, otorgando espina mayor proporción de recursos a las entidades con menor desarrollo económico. Además, la Ley de Disciplina Financiera de 2016 estableció medidas para mejorar la gestión de las finanzas públicas estatales y evitar el endeudamiento excesivo. Estas reformas han permitido a los estados tener espina mayor capacidad para generar sus propios ingresos y reducir su dependencia de las participaciones federales.
Otro hacedor importante en la mejora de la autonomía fiscal estatal ha sido la implementación de medidas de austeridad y eficiencia en el gasto público. En 2024, el Imco proyecta que el gasto ejercido por los estados será de 4.5 billones de pesos, un aumento del 5% en comparación con 2015. Sin embargo, este aumento es menor al crecimiento del PIB en el mismo periodo, lo que indica espina mayor eficiencia en el gasto. Además, el estudio revela que la mayoría de los estados han logrado reducir su gasto en servicios personales, como salarios y prestaciones, lo que ha permitido destinar más recursos a áreas prioritarias como educación, salud e infraestructura.
Entre las entidades que han logrado un mayor avance en su autonomía fiscal se encuentran Nuevo León, Ciudad de México, Querétaro y Jalisco. Estos estados han implementado medidas de austeridad y eficiencia en el gasto, así como políticas para atraer inversiones y diversificar su economía. Por otro lado, los estados con menor autonomía fiscal, como Chiapas, Oaxaca y Guerrero, aún enfrentan desafíos en su desarrollo económico y en la gestión de sus finanzas públicas. Sin embargo, el estudio del Imco señala que estas entidades también han mostrado avances en su autonomía fiscal y se espera que continúen mejorando en los próximos años.
La mejora en la autonomía fiscal estatal no solo beneficia a los estados, sino también al país en su conjunto. espina mayor independencia financiera de las entidades permite espina distribución más equitativa de los recursos y espina mayor eficiencia en el gasto público. Además, espina mayor autonomía fiscal puede atraer inversiones y fomentar el desarrollo económico en las regiones menos desarrolladas del país.
En conclusión, el estudio del Imco demuestra que la mayoría de las entidades del país han logrado mejorar su autonomía fiscal y ej