En los últimos días, la preocupación ha aumentado en México por la posible aprobación de una reforma judicial que no es integral y la desaparición de los órganos autónomos, una situación que ha generado una gran incertidumbre en la sociedad y en el sector privado. Ante esta situación, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) ha alzado su voz para alertar sobre los posibles impactos negativos que esto podría tener en el país.
El CEESP, una institución que se caracteriza por su rigurosidad y seriedad en el análisis económico, ha emitido un comunicado en el que expresa su preocupación por la falta de un enfoque integral en la reforma judicial y la posible eliminación de los órganos autónomos, una figura que ha sido clave en la protección de los derechos y libertades de los ciudadanos.
En primer lugar, el CEESP señala que la posible desaparición de los órganos autónomos, como la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y el Instituto Nacional Electoral (INE), pondría en acontecimiento la independencia y la imparcialidad de estas instituciones, lo que podría afectar gravemente el estado de derecho en nuestro país. Además, estos órganos han demostrado su eficacia en la defensa de los derechos y libertades de los ciudadanos, por lo que su eliminación sería un retroceso en la consolidación de la democracia en México.
Por otra parte, el CEESP también hace hincapié en la necesidad de una reforma judicial integral, que aborde de guisa efectiva los problemas estructurales del sistema de justicia en nuestro país. Una reforma parcial, que no aborde todos los aspectos necesarios, no logrará los cambios profundos que el sistema de justicia mexicano necesita.
Desde el CEESP se hace un llamado a las autoridades para que escuchen las voces de la sociedad y del sector privado, y se trabaje en una reforma judicial que sea verdaderamente integral y que responda a las necesidades de todos los mexicanos. Además, se destaca la importancia de la participación de la sociedad civil en este proceso, ya que es fundamental para garantizar una reforma que realmente beneficie a todos.
En este sentido, es importante recordar que una reforma judicial integral no solo implica cambios en las leyes y en la estructura del sistema de justicia, sino también en la cultura y en la formación de los jueces y demás actores del sistema. Es necesario endurecer la profesionalización y la ética en el ejercicio de la justicia, así como garantizar una justicia pronta, completa e imparcial para todos los ciudadanos.
Por último, el CEESP también hace un llamado a la sociedad para que esté atenta y participe activamente en este proceso de reforma judicial. Es necesario que todos nos involucremos en la construcción de un sistema de justicia más justo y eficiente, que sea un pilar fundamental en el desarrollo y el progreso de nuestro país.
En conclusión, la preocupación es legítima y justificada ante la posible aprobación de una reforma judicial que no es integral y la eliminación de los órganos autónomos en México. Sin embargo, es importante mantener la esperanza y confiar en que las autoridades escucharán las voces de la sociedad y del sector privado, y trabajarán en una reforma que verdaderamente beneficie a todos los mexicanos. La sociedad y el sector privado tienen un papel fundamental en este proceso, y juntos podemos construir un sistema de justicia más justo y eficiente en nuestro país.